SloMo
Kile Hanagami, coreógrafo de esta pieza se refería al cuerpo de baile de la representante Española en Eurovisión 2022 así:
«@joshidk @amazingpool_ @exon.arcos @iammariaperez @raquel_caurin Los adoro a todos. El mejor elenco de bailarines para trabajar. Para mí, nunca fuisteis bailarinas de apoyo porque estuvisteis en primera línea con Chanel. Realmente fuiste el núcleo de esta actuación y se mostró en el escenario. Trajiste mi visión a la vida y cada vez que pienso en todos ustedes, no puedo evitar sonreír.»
Y amén del amor / odio que ha suscitado esta candidatura (no voy a hablar de geopolítica ni política nacional ¡ya sabes!), el estilismo, la letra, no cabe dudad que la parte que no ha recibido queja alguna de nadie, ha sido la coreografía y la ejecución por parte de su cuerpo de baile. Como en la mayoría de proyectos, la danza es un eje principal en las producciones, ¿te has fijado en los anuncios de la TV, míralos detenidamente, la cantidad de danza que hay en ellos?. En este caso concreto esta actuación ha puesto de relieve lo importante que ha sido incorporar a un proyecto musical, junto al de iluminación e imagen, un coreógrafo y cuerpo de baile que permitan reforzar el objetivo del proyecto. Esta forma de hacer un producto «redondo», hace de SloMo una síntesis de marketing del éxito, en el que apostaron y contaron con un equipo multidisciplinar de profesionales, que en su conjunto han llevado a cabo esta azaña nacional. Y… ¿a qué viene todo esto?, a lo despistados que estamos siempre, la danza es algo mucho mas grande y valioso de lo que nos parece. ¿Recuerdas lo que le pasó al Ballet Imperial Ruso tras la llegada de los Volcheviques?, 40 años olvidados por representar una parte de la sociedad que no gustaba y dos personas enamoradas, apasionadas, Agrippina Vaganova y Sergei Diaguilev no sucumbieron y el Ballet Ruso, recuperó su lugar.
Pues en ese camino andamos, en España las personas que se mueven en el sector de la danza no tienen la mínima consideración para las administraciones públicas y sociedad en general, se somenten a una existencia basada en el «BOLO», si hay BOLO comemos, si no, hay que empezar a buscarse la vida. Son muchos los aspectos que hacen que la danza o las artes en general no tengan el aprecio debido, la falta de formación reglada desde pequeños, la falta de programación por parte de los espacios escénicos pero sobre todo, la visión de que quien baila lo hace por placer, que como a tí te gusta bailar… y sí, entiendo que como al carpintero que le gusta trabajar la madera o al médico sanar personas enfermas. La profesión de los exiliados, que para adquirir un mínimo de profesionalidad debes irte fuera. Pues en esa andamos, en que un festival de canciones ha removido un poco esta situación, la danza no sólo tiene la importancia estratégica de construcción de un buen producto, sino que desde el conocimiento y trabajo propio de la persona que baila, su cuerpo, su herramienta fundamental, las técnicas, la capacidad de transmitir al público ideas y emociones codificadas a través del movimiento, elevan a PROFESIÓN lo que parece una afición y muchos años de estudio y ensayo a la categoría de ARTE.
